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martes, 10 de febrero de 2009

La base de la política económica del PSOE: Echar balones fuera

Todos nos sobrecogimos con las espeluznantes cifras de paro del mes de enero de 2009: Casi 200.000 personas perdieron su empleo en el primer mes del año, todo un récord histórico que nos hizo alcanzar los 3,3 millones de parados en España.


Y según nuestro querido gobierno del PSOE la culpa de todo esto la tienen los bancos, que han sido los que han desencadenado la crisis, los muy malvados. Está claro que estos señores siguen sin tener ni idea de lo que hacen y lo único que saben hacer es tirar balones fuera para justificar su horrible gestión.


Ahora la culpa es de los bancos, y no de un incompetente gobierno socialista incapaz de preveer lo que todos los demás países auguraban: una fuerte crisis a nivel mundial. La crisis no la podíamos evitar, pero lo que sí podríamos haber hecho es intentar paliar sus efectos para que a los españoles les hubiera resultado más llevadero.


Un gobierno eficaz hubiera aplicado políticas económicas liberales que potenciaran el dinamismo en el sector empresarial, para generar confianza entre las personas (porque no olvidemos que los empresarios son personas, aunque para el PSOE sean sólo datos).


Ese modelo liberal sería eficaz porque la confianza hace que los empresarios inviertan y generen puestos de trabajo, evitando así que 6300 personas al día engrosaran las listas del paro en el mes de enero.


Sin embargo, la política económica socialista prefiere negar la libertad de las personas en éste ámbito y aplicar medidas asfixiantes para los ciudadanos, como la subida de impuestos (sobre todo a los pequeños empresarios).


Y aún así se sorprenden de haber generado más de un millón de pérdidas de puestos de trabajo en el último año, pero no les preocupa. Ni siquiera tienen miedo a una huelga general. ¡Normal! Hagan lo que hagan, los sindicatos no les van a levantar la voz. Al PP, por mucho menos de esto (porque a esto no habríamos llegado), le hubieran crucificado.